Pela el limón y córtalo a rodajas. Cubre el fondo de la cazuela de barro con las rodajas de limón. Vierte el caldo de pollo sobre las rodajas de limón.
Enjuaga el arroz con agua al menos tres veces, hasta que el agua salga clara. Escúrrelo e incorpóralo a la cazuela de barro.
Corta la mantequilla a dados y pica la hierba limón